Uxía Yáñez Ramil, Isabel Cavalcanti Silveira Machado, Ana Isabel Peña Martínez, Rodrigo Muíño Otero, Juan José Becerra González, Luis Ángel Quintela Arias, Marina Sánchez Macías, Pedro José García Herradón, Isabel Cavalcanti Silveira Machado
En ganado bovino, la endometritis subclínica se define como el proceso inflamatorio del endometrio, en ausencia de signos clínicos de enfermedad y con escaso o ningún exudado en el interior del útero, a partir de los 21 días postparto. Debido a sus consecuencias negativas en la eficiencia reproductiva y a su elevada incidencia (hasta un 34%; Yáñez et al., 2022), su diagnóstico temprano es de vital importancia.
Las técnicas más frecuentes para realizar el diagnóstico son la biopsia o la citología endometrial (Quintela et al., 2017). No obstante, el procesamiento actual de las muestras supone un retraso en la obtención de los resultados. Así, la necesidad de un método de diagnóstico inmediato se hace evidente. El empleo del test colorimétrico de la esterasa leucocitaria (TCEL), mediante el uso de tiras de orina reactivas, para el diagnóstico de endometritis ha sido documentado por algunos investigadores. Esta prueba podría ofrecer un diagnóstico en tan solo 2 minutos, y los resultados obtenidos hasta ahora son bastante prometedores.
Por este motivo, el objetivo de este estudio preliminar ha sido determinar la eficiencia del TCEL para el diagnóstico de la endometritis subclínica en vacas de leche. Además, se ha comprobado dicha eficiencia con dos tiras reactivas diferentes, para determinar si existe una diferencia entre marcas distintas.
Se realizaron 60 citologías endometriales mediante la técnica del cytobrush en vacas ≥30 días postparto. Una vez obtenida la muestra, se rotaba el cepillo en un portaobjetos y, posteriormente, se introducía en un tubo con 1 mL de solución salina fisiológica (Fisiovet®, Braun, Barcelona, España). Tras agitar durante 10 – 15 segundos, se introducían dos tiras reactivas (Multistix® 10SG, Siemens, Tarrytown, NY, USA; Kruuse Vet-10, Kruuse, Langeskov, Dinamarca), de manera que la zona de reacción estuviese sumergida, durante 2 minutos, de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
A continuación, se retiraban las tiras y se procedía a la lectura de acuerdo con la escala presente en el envase. Las muestras se clasificaron en positivas (reacción ≥+) o negativas (sin reacción). Para comprobar el resultado, se realizó el recuento celular de las citologías al microscopio a 2000X (Microscopio binocular B192, OPTIKA S.r.l., Ponteranica, Italia) tras su tinción con Panóptico Rápido® (Química Clínica Aplicada S.A., Tarragona, España), mediante el cálculo del porcentaje de polimorfonucleares neutrófilos (%PMN). Las muestras con >5% de PMN se consideraron positivas a endometritis (Barrio et al., 2015).
Los datos obtenidos se analizaron mediante tablas cruzadas y análisis ROC. Para las tiras Multistix® 10SG se obtuvo una sensibilidad (Se), especificidad (Sp), valor predictive positivo (VPP) y valor predictivo negativo (VPN) de 75%, 82,5%, 68,18% y 86,64%, respectivamente (P <0,001). La eficiencia total fue del 80% (48/60), con una concordancia aceptable con el recuento celular (κ=0,221, P<0,001) y un área bajo la curva de 0,800. Para las tiras KRUUSE VET-10, la Se, Sp, VPP y VPN fueron 60%, 93,33%, 90% y 70%, respectivamente (P<0,001). La eficiencia total fue del 76,6% (46/60), con una concordancia leve con el recuento celular (κ=0,200, P<0,001) y un área bajo la curva de 0,788.
Nuestros resultados sugieren que el empleo del TCEL puede ser una aproximación interesante para el diagnóstico de la endometritis subclínica en vacuno lechero. Además, hemos comparado la eficiencia de dos modelos de tiras reactivas diferentes, obteniendo una mayor relación y eficacia con Multistix® 10SG. Otros investigadores también han propuesto esta técnica como una alternativa al recuento celular, puesto que se trata de un procedimiento sencillo, rápido, a pie de vaca, y que ofrece unos resultados óptimos en cuanto a su Se, Sp, VPP y VPN (Asfar et al., 2021; Cheong et al., 2012; Couto et al., 2013; Denis-Robichaud y Dubuc, 2015; Van-Shyndel et al., 2018). En estos estudios, se han documentado Se y Sp entre el 52,2 – 89,0% y 51,8 – 72,6%, respectivamente. Estas variaciones podrían ser debidas a los diferentes puntos de corte empleados en la citología (5,5 – 10% PMN), los días postparto (desde la primera semana en algunos casos), y a la técnica de recogida de la muestra (cytobrush vs lavado intrauterino). Esta técnica podría ser empleada como un método de monitorización en el postparto, para identificar de manera temprana vacas con endometritis y establecer un protocolo de actuación. También resultaría un método sencillo para evaluar el estado de la explotación en relación con esta patología, para así revisar el manejo en el período de transición en granjas con una elevada incidencia. En conclusión, el diagnóstico de endometritis subclínicas mediante el TCEL parece una alternativa interesante al recuento microscópico de la citología, aunque su empleo rutinario aún requiere una investigación más profunda y un refinamiento de la técnica para incrementar su Se, Sp, VPP y VPN.
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