
¿Cómo han descubierto esta relación?
Se realizó el seguimiento de 60 personas diferentes, ofrecidas como voluntarias para que el equipo de la Universidad de Kansas Medical Center estudiase la dieta que estos seguían así como sus niveles de glutinación. Tras la realización de este análisis descubrieron que las personas que beben leche frecuentemente tienen los niveles de glutinación en el cerebro más alto.
Como ya sabemos, el consumo de productos ricos en antioxidantes es importante para mantener nuestras defensas, ayudando a nuestro cuerpo a luchar contra posibles enfermedades. Hasta ahora siempre se había asociado la leche a los beneficios que esta aporta a nuestros músculos y huesos, pero vemos que sus ventajas van mucho más allá.